La Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad Nacional de Córdoba (FFyH) acompaña a familiares que solicitan ser querellantes en la causa “Enterramientos Clandestinos”.

La presentación se realizó ante el Juzgado Federal N°3, donde 26 querellantes de 21 víctimas que aún permanecen desaparecidas piden participar de la investigación aportando “pruebas, testimonios, peritos y líneas de investigación, amparados en legislación nacional e internacional”.

Además, el día 29 de Abril, en el Auditorio Hugo Chávez de la Facultad, habrá un diálogo con Graciela Geuna y Soledad García, dos de las impulsoras de esta petición judicial.

“Quienes nos constituimos como querellantes, en reclamo a nuestro derecho a la verdad y al duelo, queremos recuperar los cuerpos de nuestros familiares a 50 años del golpe cívico-militar. Queremos sepultarlos y así también ayudar a la reparación de quienes fueron afectados por la violencia ejercida por el Terrorismo de Estado, es decir, el conjunto de la sociedad”, señalaron en un comunicado el grupo de 26 querellantes de 21 personas desaparecidas, residentes en Argentina y en otro países, que el viernes 11 de abril solicitaron ser querellantes en la causa denominada “Enterramientos Clandestinos”, que se investiga en el Juzgado Federal N°3 de Córdoba, a cargo de Hugo Miguel Vaca Narvaja.

Representados por el abogado Ramiro Fresneda, los familiares argumentaron su pedido en que “los crímenes de desaparición forzada de personas no cesan, desde la detención y/o secuestro hasta la aparición de sus cuerpos”, y que existe legislación internacional, a la que adhiere Argentina, que avala dicha solicitud: “La Organización de las Naciones Unidas establece nuestro derecho a participar de la búsqueda de nuestros desaparecidos”, sostuvo el grupo, al que podrían sumarse más familiares en los próximos días.

Foto: Museo de Antropología UNC
Foto: Museo de Antropología UNC

Testimonios que avalan estos reclamos de verdad y justicia

Quienes están llevando adelante esta causa relacionada con los derechos humanos, pero fundamentalmente con la memoria, ese ejercicio que no debemos perder y que siempre debe estar presente, sobre todo cuando hay necesidad de hacer justicia, impulsan la iniciativa denominada genéricamente de los “enterramientos clandestinos”, aunque después tiene otras derivaciones y otros nombres y con nombres propios y demás.

Tanto Graciela Geuna como Soledad García, tienen mucha historia para compartir y con eso fundamentan sus reclamos de memoria, verdad y justicia.

En Canal U les propusimos hacer historia respecto de esto que está relacionado directamente con la época de la dictadura militar y con lo que pasó después, que es la búsqueda de justicia a través de la memoria y la verdad.

Foto: captura de pantalla de Canal U
Foto: captura de pantalla de Canal U


La primera en responder fue Soledad, quien destacó que “lo importante es decir que el terrorismo de Estado, que nosotros no lo marcamos en Córdoba como empezado el 24 de marzo, sino antes, el 27 de febrero del 74, cuando se da el golpe llamado Navarrazo, porque desde allí empiezan ya las persecuciones sistemáticas. Si bien el golpe groso fue el 24 de marzo del 76, nosotros en la búsqueda incluso mencionamos casos de compañeros y compañeras secuestrados y asesinados previamente. Esto, por decir un dato de la realidad para contextualizar”, y prosiguió “Quizás lo que sea interesante decir es que algunas personas tuvimos, en el caso de Graciela y yo, pero es un colectivo, se va formando un colectivo realmente, porque sería muy triste decir que dos personas solamente, porque todas y todos nos sentimos víctimas, víctimas familiares, víctimas, porque somos eso, quienes estamos presentando esta querella, y quienes estamos convencidos de que la búsqueda no cesa y que la búsqueda per sé ya es reparadora.”

Más adelante, Soledad García señaló que “ha pasado mucho tiempo y como tú lo decías, Sergio, estuvimos abocados, ocupados, preocupados por construir lo que fue toda la estrategia de muchísimos juicios en Córdoba. Estamos al punto de entrar en otra megacausa el año que viene, o sea que la continuidad de la lucha por la memoria de verdad y justicia ha sido permanente. Ocupados que estuvimos en esta necesidad de llegar a imputar y condenar a los genocidas, de alguna manera hoy en el presente, más allá de que han habido, instancias de búsqueda, creemos nosotros, pensamos nosotros, que no exhaustiva aún, que queda mucho por buscar, concretamente en determinado sitio y radio del ex campo clandestino de La Perla.”

García también puntualizó que “estamos aquí justamente con esta querella presentada y con las charlas que vamos a dar o participar en las universidades y distintos lugares para difundir y que la sociedad también se apropie de esto, porque no es una deuda solamente a los familiares de las víctimas, es una deuda para con la sociedad argentina, para con la sociedad específicamente de Córdoba.”

Indudablemente que esta convocatoria, ir por la justicia, llegar a un juzgado federal, tiene que ver con una reparación particular, individual, pero difundirlo y convocar, hacerlo público y promocionarlo, también tiene que ver con hacer memoria colectiva, que es tratar de que esa memoria sirva de antídoto para que estas cosas no nos vuelvan a pasar nunca más.

Foto: captura de pantalla de Canal U
Foto: captura de pantalla de Canal U

Al realizar su aporte, Graciela Geuna dijo: “creo que una de las cosas que incidió en todo este proceso colectivo de ir pensando qué hacer y cómo hacerlo y por qué darlo a publicidad, es porque fuimos viendo que de alguna manera se ha naturalizado que los desaparecidos están desaparecidos. Es decir, hubo juicios, hubo, por ejemplo, varios juicios en el país, 340 sentencias, en Córdoba varios, el principal, la megacausa, con sentencia en 2016. Fueron condenados los culpables, pero no sabemos, pensábamos que tal vez de los tres juicios surgiera en qué lugar los habían enterrado, y no surgió. Y hablando y viendo con la gente dice, eso ya pasó, hay que acabar, alguna gente. Esperábamos que surgiera por la obligación que tenían ellos de hablar, me refiero a los genocidas.”

Geuna agregó que “de alguna manera, el hecho de que ellos digan o no digan dónde está, no les aumenta la pena porque ya son multicondenados, pero simplemente para mí es crueldad.”

Es valioso aclarar este punto, porque decir dónde está los cuerpos de quienes están desaparecidos, no les aumenta ni les aumentará la pena, pero sí disminuiría el sufrimiento y ayudaría a las víctimas y a los familiares, y el no hacerlo es simplemente por crueldad, lo que queda claro, es inevitable llegar a esa conclusión no puede tener otra lectura que la que manifiesta Geuna.

La visión de la sociedad sobre las personas desaparecidas

A Graciela y Soledad, cuando se encuentran con otras gentes de vuestra generación o con los más jóvenes, les consultamos si notan que hay una toma de conciencia de esto que nos ha pasado o que después de los juicios es como si se hubiera diluido la búsqueda de memoria, verdad y justicia y ya esté prácticamente desaparecida.

“Es una respuesta compleja”, aclaró Soledad para agregar que “seguramente vamos a tener miradas incluso diferentes” y Garciela señaló: ”Por mi parte yo sentí que después de los juicios, mucha gente pensaba que, bueno, ya está y contenta con los juicios, porque acá ha habido un contrato social de acabar con la impunidad, pero las nuevas generaciones, por ejemplo, no saben que hay miles de cuerpos y insepultos en Córdoba, incluso las viejas generaciones, muchas veces piensan que estarán en las Salinas, estarán en otro lado, o en Buenos Aires, cuando se habla de traslado, se habla del mar, pero en Córdoba no hay mar y tenemos elementos para pensar que están muy cerca los cuerpos a tres o cuatro kilómetros del casco central de La Perla, pero es como que de alguna manera la gente no sabe, no sabe que los seguimos buscando, entonces por eso es importante hablar para decir todavía hay miles de cuerpos y insepultos en Córdoba”, remarcó.

Por su parte Soledad agregó que “este mensaje tiene que ser directo y va a ser directo, está siendo directo. Cuando dije que daría una respuesta diferente, es porque además vivimos en situaciones diferentes, yo vivo permanentemente en Córdoba, o casi toda mi vida, excepto en la cárcel y el exilio, en Córdoba, pero he trabajado y trabajo mucho con las instituciones escolares, por mi historia sindical o lo que fuere, y actualmente vamos muchos compañeros y compañeras militantes del movimiento de derechos humanos, vamos a las escuelas”, mientras que luego citó un ejemplo al compartirnos una anécdota: “repasando un material que justo me salió casualmente un cuaderno, había una nota donde dos chicos de unos sextos años distintos, de escuelas y situaciones hasta años diferentes, preguntaban: ¿entonces nunca les entregaron los cuerpos?, y esa pregunta que le hace un joven hace diez años, cuando había sido hacia poco la mega causa, y otro joven mucho más cercanamente y mucho más chico en edad, es una pregunta que nosotras tenemos que instalar hoy para tomar lo que dice Graciela, que haya mayor conciencia, mayor demanda de por qué la necesidad de las víctimas de repararse, ser reparadas, pero también de la sociedad, porque qué sociedad se queda tranquila con miles de muertos insepultos, qué sociedad, una sociedad cómoda, una sociedad relajada, o una sociedad desinteresada por no pensar, y esto es lo que nosotros combatimos todos los días, en el campo de los derechos humanos?”

Será que estamos inmersos en una sociedad conservadora, como que ya está, no toquemos más eso, ya se hizo el juicio, para qué seguir, para qué averiguar, por eso qué importantes son estos disparadores, por un lado la situación de querellantes presentada en el juzgado el 11 de abril, y por otro lado el diálogo abierto propuesto para este 29 de abril, y que es lo que queremos anunciar e invitar, se hace una reunión muy importante donde Soledad García y Graciela Geuna van a estar dialogando con la gante.

Soledad detalló cómo será el encuentro al comentar que “queremos generar un diálogo, porque como presuntamente va a haber profesores, estudiantes y público, lo interesante es interactuar para que justamente no pase lo que decía Graciela, que se naturaliza y además se vuelve un tabú hablar de los enterramientos, nosotros queremos destabulizar, queremos de alguna manera plantear la necesidad, la urgencia y la posibilidad de buscar, que esto es lo que hay que trabajar en la sociedad cordobesa, que puede sentir ilegítimo lo que le agradecía de la relajación o el relajamiento que viene después de las condenas, porque fue una mega causa muy grosa, muy fuerte, que marcó una instancia en Córdoba, entonces después de eso, puede haber una historia de mayor relajación o aceptación, si bueno ya están las condenas, o comodidad como decía antes, pero queremos que esté lo problematizado presente, que sea a flor de piel.”

A su turno, Garciela agregó que “a veces no es tanto indiferencia sino falta de información, por ejemplo me encontré con una señora en la calle, que era de acá en Córdoba, nada que ver con la política y me dice: - me enteré de tu historia porque vi un programa, yo no sabía nada- y me hace una reflexión que me pareció interesante, me dice -mirá, cuando se muere alguien en España y los padres no tienen cómo traerlo, la gente pone dinero para ayudar y se puede enterrar ahí, y los muertos de ustedes no se ocupa nadie-, le dije que bueno, porque es cierto que por ahí se muere alguien en España, en México, hay que ayudar a la familia a enterrarlo, pero nosotros es como que fuéramos ciudadanos de segunda, nuestros muertos no importan.”

Dos mujeres valientes y comprometidas, se presentaron junto a otras familias ante la justicia, para reclamar por los cuerpos de los desaparecidos durante la dictadura y el 29 de Abril a las 18 horas, van a compartir un diálogo abierto con la sociedad sobre este tema que nos atraviesa como sociedad.

Soledad García y Graciela Geuna van a estar hablando con el público, con las nuevas generaciones, con las generaciones de ellas mismas y con todos aquellos que se quieran acercar, en el Auditorio Chávez que está en el Pabellón, Venezuela de la Ciudad Universitaria.

Foto: Facultad de Filosofía de la UNC
Foto: Facultad de Filosofía de la UNC